Thursday, January 18, 2007

Del amor y las parejas

Conversación de una pareja en el bus.


- ¿Qué sientes por mi? – dijo ella de pronto luego de que él le asegurara por tercera vez que lo que decía él era totalmente la verdad..
- ¿Cómo que qué siento? – respondió él con un tufillo de desatención mezclado con incomodidad. - ¿No sabes acaso que te quiero?
- ¿Lo sé? ¿Por qué piensas que lo sé?
- Porque te lo he dicho miles de veces pues.
- Me hubiera gustado que respondieras, porque te lo he demostrado mil veces. Y ese creo que es el problema. Estuve pensando mucho este fin de año, y me dije a mi misma que este año iba a ser de acciones y no solo de ideas o palabras. Mi vida se ha convertido en un cerro de ideas, planes, proyectos, sueños, pero sólo eso. No he concretado nada aun. Y eso pretendo hacer este año, y te veo a ti, nos veo a nosotros, y siento que nuestra relación está llena de esos sueños, esos planes que hacemos, esas metas que nos trazamos, pero que al final se quedan en eso.
- ¿Cómo que sólo se quedan en eso? – Se comenzaba a sentir indignación en su tono. - ¿Acaso no he hecho todo lo que dije que iba a hacer? ¿Acaso no trabajo cual burro? ¿Y encima me insinuas que no te quiero?
- Ya te ofendiste y comienzas a exasperarte. ¿Sabes que ese es indicativo de que algo ocultas o a algo le temes?
- ¿De donde diablos ahora resultamos con que te estoy ocultando algo? A ver, dime, ¿qué te estoy ocultando? ¿Qué no te he dicho?
- Contigo realmente nunca se. Y he escogido muchas veces hacerme de la vista gorda, pero hay días en que sencillamente no puedo. Cada domingo en misa escojo renovar en mi silencio mis votos. Le pido a Dios me de paciencia, me de fuerzas para entenderte, para perdonarte, para. . .
- ¿Para perdonarme? – interrumpió él indignado. ¿No se supone que ya me habías perdonado? ¿Qué debo hacer? ¿Hacer que me crucifiquen para ganarme tu cariño?
- No insultes mi fe.
- No me insultes tú a mi.
- Nadie te ha insultado. Sólo te digo lo que siento.
- Pero es que me sacas ese trapito a cada rato. Ya cánsate. Se suponía que ibamos a reiniciar nuestra vida, pero sigues y sigues con eso. Me equivoqué. Lo acepté. Hice algo malo, aunque lo hice por una buena razón, pero . . .
- Ese es tu problema. Te justificas, le encuentras siempre excusas a tus acciones. Jamás aceptas que realemnte la fregaste. No aceptas que realmente jodiste todo. Dices, si, disculpame, me equivoqué, pero es sólo de la boca para afuera, pero dentro tuyo estas diciendote, “aunque mis intenciones fueron las mejores” o “realmente no todo fue mi culpa . .” Ya madura.
- Ahora soy inmaduro.
- ¿Ves? Te quedas en la superficie. ¿Eso es lo que más te preocupa de lo que he dicho? Si no ves los errores en ti, si no ves la raiz del problema en ti mismo, jamás se solucionaran las cosas, porque andas culpando al resto de todo lo malo que te pase, y entonces buscas las solucioens fuera, en otras circunstancias, en otras personas, y no donde debes, dentro de ti. En ti está el problema y la solución también.
- Ahora resulta que soy un problema.
- ¿Qué? ¿Sabes qué? Avisame cuando crezcas, contigo no se puede . . .
- Ya ya, está bien. Tienes razón. Pero realmente me da colera que no valores lo mucho que te quiero y aprecio. ¿Acaso soy de los que olvidan un aniversario? Nunca he dejado de sorprenderte con un regalito, unas flores, o una salida romántica. Siempre te demuesto mi amor.
- Corazón, mil veces te he dicho que el amor no solo son tarjetas, flores o amaneceres romanticos. Esa es la parte fácil y superficial del amor. No es real. Es pasajero. Se trata de hacer las cosas que haces sin que te las pidan, las cosas que detestas pero igual haces por tu pareja, es saber ser un amigo . .
- Pero . .
- No – le dijo ella tapándole la boca con la mano – es saber también callarse y escuchar. Yo te amo. Con todo mi ser. Pero tengo miedo y estoy llena de dudas y sólo tú puedes darme la paz que debe ir unida a este amor. Al final no puedo decirte que es el amor, tu debes sentirlo por ti mismo, pero sí puedo decirte que esos detalles por muy lindos que son, no lo son.
- ¿Tan miserable te sientes?
- Miserable es una palabra tan fea . .
- Pero es la correcta. . . ¿no?
Esbozó ella un intento de sonrisa, con los ojos ya humedecidos. Parecía sentirse rendida. Parecía estar por dentro de rodillas, con los brazos abiertos, en parte esperando el golpe final, en parte rogándole a Dios por una luz.
- ¿Sabes? – Dijo él luego de unos minutos de silencio. – Cuando nos casamos y comencé a ir a misa contigo, la verdad es que me sentía incómodo. Crecí en un hogar católico aunque no practicante, como sabes, pero realmente jamás en mi vida sentí la presencia de Dios. No sabía realmente como iría a decirle a mis hijos, “Sí, Dios existe”, si yo tenía mis dudas. No sabía como hablarles de un Dios que está en todos lados, cuando no lo veía por ningún lado.
- ¿A qué viene todo esto? ¿Por qué te sales del tema si . .
- No me salgo del tema. Nunca me he salido del tema. El tema, aunque no parezca, está presente en cada momento de mi vida. Porque me siento muchas veces no valorado, porque siento otras tantas que no te valoro. Porque siento muchas veces que no hemos podido superar aquello que nos separó una vez, y no sé si alguna vez podremos.
- Con esa mentalidad definitivamente no lo haremos.
- No es que piense en forma pesimista. No es que me rinda. Es que me descorazono, es que en situaciones como esta me siento sin fe.
- La fe nunca la pierdes. La fe está en ti.
- El problema me parece no es tener fe. El problema es tener razones para mantenerla.
- Amor, yo tengo fe en ti – le dijo ella rodeando sus cachetes con las palmas de sus manos, dejando que sus lagriams emaparan sus manos.. – Siempre la he tenido. Si no la tuviera, no me habría casado contigo. Y tengo fe en que Dios, ni yo ni nadie mas, te ayudará a encontrar y sacar toda esa fuerza que llevas dentro. Porque la tienes, porque no necesitas que nadie te la dé o regale, está en ti. Yo la veo. Quisiera que tu la vieras.
- Ahora cuando voy a misa, las cosas son diferentes. Realmente sé que Dios está ahi, aunque sigo creyendo que está en todos lados y no solo en misa . .
- No te vas a escapar de ir conmigo a misa todos los domingos con esa teoría . le dijo ella sonriendo.
- No quiero tampoco. Pero lo que decía es que cuando te veo, cuando siento que me amas, cuando siento lo que siento contigo, sé que Dios está ahi, puedo sentirlo. .
- Y Dios tiene misteriosas formas de manifestarse, ya sabrá él cuando y cómo manifestarse a ti. Darte esa experiencia de Dios que te falta.
- Ya lo hizo. Tú eres mi experiencia de Dios. Sé que Dios te puso en mi camino. No como una misión para ti, pero si para yo poder ver en tu amor, su amor, para ver en tu luz y fuerza las suyas.
- “No seas floro”, le dijo ella sonriendo y empujándolo suavemente, aunque no pudiendo evitar que los ojos se le humedecieran.
- No es floro. Créeme.
- Te creo.
- Voy a hacerte la mujer más feliz del mundo, tartaré de aprender de mis erroes, trataré de mejorar, de ser más abierto, de compartoir todo contigo. Me esforzaré por llevarte a ti y a nuestros hijos lo más alto que se pueda. Tengan lo mejor.
- ¿Qué tan lejos quieres llegar?
- No lo sé, pero si es contigo, sea donde sea que lleguemos será la distancia correcta.
- Eso es verdad, y disfrutaré mucho del trayecto, sin preocuparme mucho del destino final. Mientras mantengamos el rumbo, todo está bien. Te lo aseguro.
- Ya casi llegamos. En el siguiente paradero bajamos.
- ¿Por qué bajar? Quiero que continúe este viaje mucho más. – dijo ella antes de abrazarle y besarle.


Si se pudiera definir a algo como la más importante, lo vital. Aquello que nunca debe faltar en una pareja, eso sería la verdad. la verdad debe estar presente en todo. A la hroa de manisfestarse su cariño. A la hora de manifestarse sus angustias, enojos, desencatos preocupaciones, etc. También debe estar presente a la hora de definir el camino que seguiran, sus repsonsabilidades, sus metas, sus sueños. A la hora de comunicarse. Porque no solo debe haber comunicación, sino que esta debe ser sincera. Sin guardarse nada. Asi fuera con las mejores intenciones del mundo. Y debe haber también fe. No solo en Dios, que es importante, sino en ellos mismos. El uno con el otro. Si hay eso. Entonces no hay de que preocuparse, solo hay que ser constantes, hay que aprender de los errores, hay que ver a la pareja al lado, de la mano, caminando juntos, para que cuando uno tropiece esté el otro para darle una mano y seguir andando, para que cuando uno seinta el cansancio, esté el otro para cargarlo un tramo y seguir andando, para cuando vayan cumpliendo sus metas estén juntos para celebrarlas ys eguir luego andando, para cuando hayan trsitezas, esten para consuolarse y animarse, para seguir andando. Y asi, andando y andando, valoren mucho más el trayecto, sin preocuparse demasiado en el destino.

Thursday, January 11, 2007

Feliz Cumpleaños Agatha!

Cool Slideshows




Agatha es mi perrita labrador negrita, alguna vez bautizada Diosa de Ébano. Vino a colarse en nuestras vidas hace ya 3 años. Este 14 de Enero es su cumpleaños y es por eso que este post es para ella. Su feliz Cumpleaños adelantadito, pues el fin de semana andaremos full y seguramente no tendré tiempo de postear.

Agatha es juguetona, traviesa, inquieta y súper engreída. (su engreidota número 1: Guida). En ocasiones realmente me da flojera salir a caminar los 8Km que a veces caminamos con ella para dar la vuelta al pentagonito, pero ya en el camino, disfruto del paseo. De cuando en cuando me gusta fastidiarla como jugando (lo cual hace renegar a Guida), pero Agatha sabe bien que es juego, aunque por ratos se emociona tantito de más. Es bastante celosa y protectora, y con los enanos se lleva rebien. Al único que aun no pasa pero ni con agua es a Hugo. Pero bueno, ya se harán amigos eventualmente.

Creo que Guida a veces cree que no la quiero lo suficiente. El caso es que sí. Si adoro a mi negrita linda, y me gusta verla correr por su pelota, mientras sus orejotas vuelan, y esa lengua que toda la vida está al aire. Me gusta cuando se acerca a la puerta de la cocina cuando siente pasos, o como le gusta que le acaricie el lomo, como se inquieta cual cachorro a la hora de su comida, y como lucha por su pelota cuando se la quito. Me causa a veces estrés cuando ladra, pero más veces me causa ternura verla al lado de la puerta de vidrio cuando me hace guardia mientras trabajo en la computadora, como esperando que acabe y juguemos un rato. En fin, adoro a mi agathita linda, y espeor esté con nosotros por muchos más años. Ya pronto habrá agathitos jrs!!! Jaja

Este post es para ti Agatha que nos provocas tantas sonrisas y con tu incondicional cariño nos enseñas un poco de amor y fidelidad.

Wednesday, January 10, 2007

¡Qué lindas! ¿Son gemelas?

Cool Slideshows


Estas son mis sobrinas Ale y Mariana. Son lindas las enanas. Andan aburridas de que les pregunten si son mellizas o gemelas. A veces de juego a veces en serio. Cada una es especial en su única forma de ser. Son adorables y lindas las dos aunque sus personalidades y carácteres son muy distintos . . . más adelante colocaré fotos de mis demás sobrinos. Cuestión de que mis hermanas me pasen fotos . . .

Tu palabra es tu bien más valioso

Si hay algo que Guida odia casi tanto como la ineficiencia, es el incumplimiento. Cómo reniega cuando alguien dice que va a hacer algo y finalmente no lo hace. “¡Pero es su palabra!”, suele decir, “si digo que voy a hacer A, entonces hago A.” Y bueno, razón no le falta en absoluto y el problema es que la gran mayoría estamos acostumbrados a decir y no hacer. Es facilísimo decir cuando nos apremian. . uyyy . . ahorita . . ahorita lo hago . . o ¡mañana sin falta! Cuando realmente no tenemos la menor idea de si podrá ser así, o peor aun, cuando estamos segurísimos que mañana algo nuevo tendremos que decir para excusarnos. Nos gusta patear el problema. Lo peor es que no vemos que eso nos daña, perjudica nuestra imagen, nuestra credibilidad. Y todos deben saberlo, muchas veces no hay nada más vital que tu credibilidad. Lo de “Pedrito y el Lobo” no es solo una fábula, ¡es la purita verdad! No es tan difícil organizarnos, pero aun así no nos gusta hacerlo. Es triste que para los peruanos no nos sea extraño ver unas colotas en algunos sitios y enterarnos que es último día para tramitar tal documento o último día para tal otra cosa.

Guida hace unos días me decía, cuando pasábamos frente una caja de Ripley que tenía una propaganda que decía “Pague cero este mes”: “¿qué felicidad podría producirme el no pagar este mes? Acaso quiere decir que no voy a pagar? ¡Me lo van a cargar para el siguiente mes y con intereses!” Mi gorda es simple en ese sentido. Su filosofía es: Las obligaciones se cumplen en su momento, y si sé que no tendré, no me comprometo, y si hay alguna emergencia, entonces con antelación me acerco a conversar soluciones. No espero a que me busquen. En ese sentido se parece a mi padre, quien nunca en su vida, pudiendo tenerlas, ha tenido una sola tarjeta de crédito. Es enemigo de los créditos. Siempre dice, si quiero algo, verifico con mi bolsillo, si hay, bien, si no, para más adelante será. Pero no todos somos así. Nos gusta el crédito, el poder pagar algo ahora con la tarjetita, y ya luego nos preocuparemos de cómo pagarlo. Ahora se disfruta, después uno se preocupa. Esa pareciera ser la idea. Ahora me pongo a pensar que en mi vida he conocido a muchas personas con n tarjetas. Ripley Saga, Visa, Mastercard, Diners, American Express, Curacao, Carsa, Metro, Plaza Vea . . en fin . . . pareciera que es su hobbie coleccionar las tarjetas como figuritas. Y es más, si un mes no pueden pagar Saga, sacan de Ripley efectivo a cuotas, para ir y pagar Saga. Hace unos días me encontré en el banco con un amigo de infancia que estaba con su esposa haciendo trámites. Conversando, me cuenta que entre él y su esposa tienen 10 tarjetas. Y que estaban en el banco cerrando algunas, pues otro banco había comprado todas sus deudas. Otra manera de salvar la situación muy usada. Las entidades financieras conocen perfectamente de nuestras malas costumbres, por eso es que ofrecen todas estas alternativas de soluciones engañosas, o de patear el problema. Que en su momento se sienten como un alivio y como una formad e solucionar los problemas. Y que será asi para quien realmente decida corregir sus errores y dejar de recibir notificaciones de atraso casi a diario a su casa y por fin pagar todo. Pero no para quienes no se corrigen y al timepo viendose liberados de todos los apremios, vuelvan a la carga con endeudarse. Por eso es que si eres una persona que compra con su tarjeta a una cuota, y pagas siempre puntual, para el banco eres un apestado. Te respeta si, te dará mayores créditos, pero si mantienes esa política, no serás su público objetivo, pues aunque se cuiden mucho de los malos pagadores a la hora de dar créditos, lo que les conviene es que seas mal pagador, pero no tanto, lo suficiente como para atrasarte, te compren deudas, compres a 36 cuotas, aplaces pagos y termines pagando los 300 soles que te prestaron mas 500 de intereses, moras y gastos de cobranza. Es ahí cuando te conviertes en su engreído.

Debemos pensar antes de actuar para todo en la vida. A eso podemos completarlo con, debemos pensar, planear y luego actuar. Es difícil el proceso de cambiar, créanme, a mi me está costando horrores cambiar muchos defectos que tengo. Pero es gratificante ver los resultados, por muy frustrante que sea limpiar tu imagen con alguien a quien le hayas fallado y que sea reticente para volver a confiar en ti, en tu palabra o en tu calidad de trabajo. Que eso no te amilane, sé paciente. Todo lo que en la vida se hace con paciencia y perseverancia tiene su fruto y recompensa. No patees problemas, no asumas obligaciones que sabes que no podrás afrontar luego, por muy desesperado que estés. No es la idea no tomar créditos. (Dios sabe que no podré comprar mi casita sin un crédito) pero nunca asumas créditos imposibles de cumplir o que nada deba ocurrir para que todo esté en equilibrio. Nunca uno está libre de emergencias, accidentes y demás. Siempre hay que dejar campo a las emergencias. Olvídate del “si todo sale bien” o “si todo sale como planeado”. ¡Casi nunca pasa eso! Alguna vez me dijeron esto: “Nunca amenaces ni prometas algo que sabes que no podrás cumplir”. Me lo dijeron en un contexto de educación de los hijos, pero creo que se aplica a todo en la vida. Por que toma mucho tiempo crear confianza en los demás por nosotros, pero toma tan solo una sola acción para destruirla. Puedes tomar o no estos consejos que vienen te lo puedo asegurar de alguien que los va aprendiendo, a veces a la mala, de sus errores, (No me he olvidado de ti chino! ya arreglamos! jaja) y no de alguien que nunca los cometió.

Tuesday, January 09, 2007

Del amor y la vida

Hace no mucho escuchaba a una querida amiga entre lágrimas y desconsuelo, liberar muchas de sus angustias y frustraciones. Dicen que el amor duele, y hay un sólo amor que duele más que el no correspondido. El amor traicionado. Su historia es muy parecida a la que muchos han vivido, así que no vale la pena detallarla. El punto es que vamos por la vida creyendo en las famosas mentiritas blancas, vivimos y creemos realmente en la política del “amor que no ve, amor que no siente”. Muchas personas creen que el romper corazones y el que te lo rompan, es parte de la vida, como caerse de la bicicleta o coger la gripe. Muchos creemos que un “lo siento” siempre es suficiente, y cuando no lo parezca, es porque hace falta aderezarlo con tiempo. Mi amiga me preguntaba secándose por enésima vez las lágrimas: ¿qué demonios busca un hombre en una mujer? ¿Qué quiere? ¿Qué lo hace feliz y le hace desear darlo todo por una mujer? Lo primero que pensé fue que no hay una respuesta universal para esa pregunta. Diablos, millones se hacen esa misma pregunta acerca de las mujeres también y no veo un manual rondando la red. Cada hombre, así como también cada mujer, le dije, busca cosas diferentes. Desde lo más vanal, hasta lo más espiritual. No todos los hombres somos iguales, por ende no tenemos ni los mismos gustos ni las mismas aspiraciones, mucho menos aun, los mismos valores, ideales y principios. Así que quien comience diciéndote: Todos los hombres. . . Así son todos. . . Siempre es lo mismo con los hombres. . . tan solo dile: estas hablando sonseras. Son palabras peligrosas e irresponsables: siempre, todo, nunca. . . Recuerdo que un día una tía mía renegaba con mi tío y dijo, ¡todos los hombres son unos idiotas! Y mi abuelo medio sonriendo dijo casi susurrando: “No todos, algunos se quedan solteros”. Me hizo tanta gracia en su momento esa ocurrencia. Pero bueno, me demuestra que todo depende de las perspectivas. Mi abuelo vivió desengañado del amor. Un amor mal pagado como solía decir él. Mi tía probablemente a las pocas horas estaba ya acurrucada al lado de mi tío considerándolo el hombre más maravilloso. Así es el amor.

Yo he considerado siempre, tal vez por ser hombre, que la mayoría de hombres somos complicados en nuestra simplicidad. No le damos mil vueltas a las cosas, no nos fijamos en los detalles, las cosas que tomamos en cuenta son las dichas y escuchadas, no conocemos el concepto de “se sobreentiende”, para nosotros no hay nada tácito. Cuando una mujer está visiblemente deprimida o triste y su pareja le pregunta ¿te pasa algo? Lo más seguro es que responda: Nada. Acá viene lo interesante. Los hombres hacemos una de dos cosas, o tomamos esa respuesta como verdadera y seguimos con nuestra vida, o tomamos esa respuesta como falsa y nos frustramos y enojamos con ella, por pregonar el espíritu de conversar y compartir, para luego guardarse las cosas. Mientras tanto, las mujeres muy probablemente dieron esa respuesta por una de dos razones también. O bien consideran que él debiera saber por qué es que está así, y si no lo sabe, entonces no tiene ningún sentido decírselo, o bien porque la consideran una pregunta tonta, pues es obvio que tienen algo, por ende se acogen a la política de: “a una pregunta ridícula, una respuesta igual”. Y la verdad es que esto sucede mucho porque realmente nosotros no tenemos ese “sexto sentido” que dicen que tienen las mujeres. Ese que les hace entender y saber las cosas tan solo por los gestos o las miradas, sin necesidad de decirlas o escucharlas. Nosotros síi necesitamos muchas veces, sobretodo a lo que se refiere a sentimientos o apreciaciones, decirle sin decirlo a las mujeres: “A ver, como para bruto, explícamelo”.

Al final este no era un post para hablar sobre las diferencias entre hombres y mujeres, ni tampoco para hablar de amor. A decir verdad no sé cual es la intención. Me senté tan solo a escribir recordando a mi amiga y su situación. Me puse a pensar un poco en mi vida amorosa. Guida ha sido estupenda conmigo. Ha sido paciente. Ha sido una roca cuando necesitaba apoyarme. Ha sido blanda cuando necesitaba recostarme, repensar las cosas o descansar. Ha sido calida, cuando necesitaba refugio y ha sido amorosa incluso tal vez cuando yo no lo era. Es verdad que como buen hombre algunas veces le he hecho derramar amargas lágrimas, confundirla y cansarla. Pero también es verdad que nunca se dio por vencida, que nunca renunció a mí y que siempre confió en mí. Logrando así que yo confiara en mí. Podría decir que le debo mucho, pero la verdad es que cuando se ama no se cobra ni se debe, solo se da y se da. Eso me lo enseñó ella.

Mi más grande anhelo fue siempre el ser feliz. Desde niño lo que más quería para mi vida, era que fuera feliz. Y muchas veces se lo dije a ella. Y otras tantas ella me preguntaba: ¿y qué es lo que te haría feliz? Lo lógico habría sido que supiera la respuesta a esa pregunta. No la sabía. Hasta que un día dejo de preguntármelo. Y como buen hombre pensé, “ya no le importa”, “ya no le interesa mi felicidad”, “se aburrió”. Pero no, como ven soy simple, como buen hombre, y mis primeras respuestas fueron simples. Luego entendí que la razón era totalmente contraria a lo que creía. Ya lo sabía. Ya lo había entendido. Pero como buena mujer también, no planeaba decírmelo. Debía descubrirlo por mí mismo. No tenía sentido decírmelo.

Hoy lo he entendido. Y sé qué es lo que necesito para ser feliz. Sé qué es lo que me hace feliz. Y en esas voy. Y sé también que, para ser completamente feliz, debo también hacer feliz a mi mujer, porque un hombre jamás será feliz si su pareja no lo es. Así que trata de ser feliz y comienza por hacer felices a quienes te rodean y principalmente a tu pareja. No generalices nunca. Tenemos rasgos comunes que debes aprender a identificar tal vez, pero somos distintos en muchos niveles. Entrégate a tu relación y sé fuerte y persistente mientras lo merezca. Nunca consideres que es mucho esfuerzo o mucho sacrificio o mucha dedicación. Nunca es mucho. Solía antes creer que Guida esperaba o pedía mucho de mi. Finalmente me di cuenta que de ser así, igual vale la pena, porque ella vale mucho.

Wednesday, January 03, 2007

Refuerza tus destrezas

Muchas veces me pierdo en algunos sueños, pero más veces aun me pierdo en algunos recuerdos. Podrá pasar alguna vez tal vez que me sorprendan con una sonrisa en el rostro, y me lancen entonces esa clasiquísima frase que dice "el que solo se rie, de sus maldades se acuerda". Pero realmente distará mucho de ser ese el motivo de mi sonrisa. (Al menos la mayoría de las veces). Y es que probablemente sea el caso que ande perdido en alguno de mis tantos gratos recuerdos de niñez, que probablemente serán algunos de ellos temas de siguientes posts (ya que muchas cosas aprendi de niño). No planeo en estos posts describir o hablar especificamente de nadie de mi familia. Si toman costumbre de leer estos pequeños posts, iran conociéndolos de a pocos.
Una de las primeras cosas que aprendí en esta vida, se dio por el ejemplo mas no por la palabra. El amor y preocupación de mi padre por sus hijos. Es verdad que algunos errores cometió, pero bueno, es parte del ser padre, se cometen erroes, se tiene aciertos, y al final del día la balanza ha de inclinarse hacia el lado de los aciertos si es que fuiste un buen padre. En su caso creo yo que sencillamente los aciertos no sólo inclinaron sino que tumbaron hacia ese lado la balanza por el peso.
El motivo de este post es que estuve recordando hace unos minutos (ya pasa de la media noche) la ocasión en que gané un concurso de pintura. Estoy hablando de mis tiernos 7 u 8 años probablemente. Al enterarse mi padre, me felicitó y me entregó unos estilografos que tenía, para que los use. Anteriormente, cuando tendría unos 5 o 6 años me enseñó a sumar y restar. Aparentemente lo aprendí rapidamente, porque al poco tiempo ya me estaba tomando las tablas de multiplicar (las cuales tenía que saber "al dedillo" como él me decía, sino no había premio. Y así seguimos y seguimos hasta que volteaba Baldores en los veranos (como todas mis hermanas lo habían hecho antes) y la matemática se hizo un juego de niños en el colegio, y una destreza para mí. Por otro lado, mi primer contacto con la literatura se debió a que mi adorada madrina, para mi 6to cumpleaños me regaló una serie de cuentos ilustrados muy bonitos. Entre ellos, el que más me fascinó fue uno que se llamaba "Miguel Strogoff". Lo leía y releía, hasta que a los pocos días, mi padre se aparece tendiéndome un libro pequeño, auqnue algo grueso y verde y me dice, acostúmbrate a leer el libro de verdad y no los resúmenes. Algo me cautivó respecto a la idea, y lo leí. Me fascinó. ¡Quién mejor para darte la bienvenida al mundo de la literatura que Julio Verne! Desde aquella vez quedé fascinado con la lectura. Por cierto, aun conservo ese libro. 24 años después. Es uno de mis más preciados bienes. Ya en secundaria, en segundo o tercer año, no recuerdo bien, gané un concurso de redacción. Al día siguiente me regaló un block, y me dijo que debiera escribir en él de lo que quisiera y se me ocurriera, y perfeccionarme. Así lo hice cada vez que podía.
Nunca me gustaron mucho los concursos, es por eso tal vez que recién en 4to año de secundaria participé en mi primer concurso de matemáticas. Quedé en 11vo puesto a nivel distrital. ¡Una estadía en Puerto Azul fue el premio que obtuve! Lástima que no regalaban los pasajes para llegar allá; jamás fui. He aquí que viene mi más grande recuerdo con mi padre. Participé nuevamente en aquel concurso al siguiente año, mi padre nos acompañó al evento (participó también mi hermana Magali) y esperó con nostoros los resultados. Cuando me anunciaron como ganador corrió (como nunca lo había visto correr creo yo) con los brazos abiertos a abrazarme, emocionado y orgulloso el hombre. Yo estaba que ni me lo podía creer obviamente. El premio fue un pasaje Lima-Miami-Lima. ¡Esta vez me dieron los pasajes pero no la estadía! Que contrariedad, pero bueno, a este viaje si me fui. Si cuento este episodio de mi vida no es para elevar un tantito mi ego, sino por aquello que me dijo mi padre en esta oportunidad. Me dijo, hagas lo que hagas en la vida, logres lo que logres, obtengas lo que obtengas, no será ni para mi, ni para tu mamá. Será para ti y por ende tal vez en el futuro para la familia que formes. Para nosotros sólo es el orgullo de verte a ti y a tus hermanas (tengo 5) realizarse, lograr sus objetivos, triunfar en la vida, llegar más lejos que nosotros. Y no fue hasta hace poco, que la ingratitud recién me dejó ver, y juntar todos estos recuerdos, para darme cuenta que siemre estuvo ahi. Que siempre me estuvo impulsando a ser mejor. Que si bien es cierto se preocupaba como todo padre en que superara mis temores, que mejorara en aquello que no era bueno, se preocupaba más aun en que mejorara en aquello que era bueno. Cuido siempre de estar al tanto de aquello para lo cual eramos buenos, aquello para lo que tuvieramos aptitudes o disfrutaramos en hacer. Nos dio las herramientas necesarias para cuando tuvieramos que valernos por nosotros mismos.

El regalo más valioso que me dió mi padre fue mi educación, siempre lo he dicho. La mejor lección que me dio fue su ejemplo, porque como todo buen maestro, es un gran estudiante. Me enseñó el verdadero valor de las cosas, a perseverar y alcanzar, a no esperar que la manzana caiga en mis manos, sino hacer todo lo posible por alcanzarla, por cogerla con mis manos y arrancarla de la rama. Me enseñó, como hace poco me lo mencionó Guida, que allí donde no pueda llegar tu mano, debe llegar tu ingenio. Me enseñó sin decírmelo que no sólo debo limar mis asperezas, sino que debo con más ganas pulir y hacer brillar mis mejores areas. Y me enseñó lo que a veces olvidamos, aquello que es lo único que quieren nuestros padres y hasta eso les negamos. Quieren sentirse orgullosos, sólo eso. No para hinchar el pecho y decir . . ese es mi hijo . . yo lo hice solito . . sino para poder sabernos felices, realizados y encaminados. Decirse a ellos mismos, no al mundo, en silencio, casi en secreto, en sus corazones: Misión cumplida.